|
|
EQUIVALENCIA ENTRE MASA Y ENERGÍA |
|
|
|
|
|
A partir de la ecuación
fundamental de la dinámica de una partícula: |
|
(mc2)2=
E2 – (p·c)2 |
|
Se obtiene en el sistema de referencia propio, ligado a
la partícula (donde E=E0, p=0), la siguiente
relación entre la energía propia y la masa de la
partícula: |
|
|
E0 = mc2 |
|
Esta ecuación afirma que la energía propia
de una partícula es proporcional a su masa, siendo la constante de proporcionalidad
una constante universal (c2)
En relación con este hecho Einstein afirmó que “masa y energía son
esencialmente análogas pues sólo son expresiones
del mismo ente”, es decir, dio significado
físico a esta relación interpretándola como una equivalencia entre la masa y
la energía. Según este punto de vista, la
masa de una partícula da en Kg la energía
que posee mientras ella permanezca en reposo. Este
contenido energético había pasado desapercibido
para la mecánica newtoniana y su elevadísimo orden de
magnitud sugirió enseguida la idea de que
mediante procesos adecuados se podrían obtener
cantidades de energía ingentes. |
|
|
|
|
|
|
|
|
|
En efecto, el elevadísimo
valor que tiene el factor de conversión entre
la masa y la energía hace que la energía propia
sea enorme para cantidades de masa muy pequeñas.
Así, la energía
equivalente a 1g de materia es E0
= mc2 = 0,001kg · (3·108
m·s-1)2 = 9·1013J.
El orden de magnitud de esta gran cantidad de
energía se aprecia mejor cuando se compara, por
ejemplo, con los aproximadamente 5·104J
de energía térmica, que se desprenden en la
combustión de 1g de butano. Esta energía
es unos dos mil millones de veces
menor que la energía propia de ese mismo gramo
de butano. Por lo tanto, un proceso ordinario de
combustión sólo aprovecha una parte
insignificante de la masa (o energía
equivalente) disponible. En efecto, tras
la combustión de 1g de masa (equivalente
a una energía propia “no útil” de 9·1013J
de butano), se obtiene una cantidad prácticamente
igual de masa de los productos finales (dióxido
de carbono y vapor de agua), y únicamente
5,56·10-13g [ es decir, m
= E0/c2 = 5·104/(3·108)2]
de energía térmica. |
|
El establecimiento de la relatividad precedió al
desarrollo de otras áreas de
física moderna (física nuclear,
física de partículas) que estudiaron mecanismos
mucho más eficaces para aprovechar energía
mediante procesos como, por ejemplo, la fisión y
la fusión nuclear. En ellos
se aprovecha un porcentaje mucho más elevado de
la masa (o energía equivalente) disponible, es
decir, se transforma una cantidad mucho mayor de
masa en energía “útil”. Este es seguramente uno
de los motivos por los que la ley de la
equivalencia entre la masa y la energía es una
de las fórmulas más conocidas de la física. |
|
|
|
|
|
|
|
|
La animación
adjunta ilustra la
equivalencia entre la masa y
la energía. Permite al usuario modificar la temperatura de un
cuerpo que cuelga de un muelle.
Al aumentar dicha temperatura
crece la agitación interna de
sus partículas y, por
tanto, se incrementa su energía
interna. Teniendo en cuenta la
equivalencia entre la masa y
la energía, ello supone que también
aumenta la masa del cuerpo un
valor igual al cociente entre
ese incremento de energía y el
cuadrado de la velocidad de la
luz y por
tanto, estira más el muelle
(obviamente, de forma
imperceptible)
Clic
aquí
para
descargar esta animación. Si no lo tienes instala
Modellus
2.5 (32 bits) o
Modellus 3 (64 bits) |
|
|
|
|
|
|
|
|