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LAS ONDAS GRAVITACIONALES Y EL ORIGEN DEL UNIVERSO |
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Otro tipo
experimento de candente actualidad busca la posible observación
de las huellas que debieron dejar en la radiación de fondo las ondas gravitacionales generadas en los
primeros instantes de la formación del Universo. |
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Alan Guth |
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En los
años setenta,
Alan Guth (1947-
) elaboró la primera formulación de la teoría del
universo inflacionario, según la cual, con el Big Bang se debió producir un
proceso de inflación o expansión acelerada del Universo durante
unas fracciones infinitesimales de segundo (lo llamó "el
Bang del Big Bang"). Dicho proceso inflacionario habría generado
fluctuaciones cuánticas que, tras ser estiradas por la expansión
del Universo, deben producir dos tipos de perturbaciones en el
espacio-tiempo: ondas de densidad y ondas
gravitacionales. Las
ondas de densidad fueron observadas inicialmente por el satélite COBE, en 1992, y más tarde por los WMAP y Planck
y sus propiedades están perfectamente de acuerdo
con las predicciones de la teoría de inflación.
Por su parte, las ondas gravitacionales
constituían una de las predicciones más buscadas
de la teoría y en marzo de 2014 un grupo de
investigación anunció en la prensa la posible
confirmación de su existencia. |
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Tras la huella del universo inicial
(El país, 19/03/2014) |
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Dicho anuncio se basó en que las ondas gravitacionales
producidas en "el Bang del Big Bang" han de generar un
patrón característico en la orientación de la
polarización de la radiación cósmica de fondo. Como dicha
radiación está muy débilmente polarizada, la señal que
se buscaba es muy pequeña y, en consecuencia, muy difícil
de detectar. En este caso, se partió de
datos recogidos por un telescopio terrestre (BICEP-2,
instalado en el Polo Sur),
tras observar una región del firmamento en una
única frecuencia en la banda de las microondas.
La afirmación de que se habría podido detectar la
señal buscada se basaba en la asunción de que las
emisiones polarizadas en primer plano son
prácticamente despreciables en esta región del
espectro electromagnético. |
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Pero, enseguida, la interpretación de estos datos
fue
motivo de encendido debate en la comunidad científica. La señal
primordial de la radiación cósmica realmente se oculta detrás de
la radiación de fondo de nuestra galaxia, la Vía Láctea, y el
primer análisis de los datos obtenidos por el telescopio BICEP-2 no
permitía afirmar con absoluta certeza que se hubiera sustraído
debidamente el efecto del polvo de nuestra Galaxia. |
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Sombras de duda sobre las nuevas
huellas del universo primitivo
(El país, 27/05/2014) |
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En esta
situación, se esperaba
que el análisis de los datos que obtuvo el telescopio espacial
europeo Planck, gracias a sus medidas
de gran precisión, sirviera para aislar la polarización de la
señal, y, quizá, pudiera dar una respuesta definitiva.
Y, se realizó un análisis minucioso de la combinación de
datos del Bicep-2 con los del telescopio PlancK [La
imagen adjunta (Fuente:
ESA/Planck Collaboration)
corresponde a un fragmento del cielo observado por el
telescopio Bicep-2 tal y como lo ha visto el telescopio
espacial europeo "Planck"], que ha llevado finalmente a
la conclusión de que, de momento, no se pueden dar por
encontradas, a partir de estos estudios, las ondas
gravitacionales.
Adiós a las ondas del principio
del universo
(El país,
02/02/2015) |
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